Como cualquier otro relleno blando, el propósito del AFT es mejorar la apariencia mediante un aumento o rellenando un área poco profunda. La única diferencia es que las inyecciones de grasa son rellenos donados por su propio cuerpo y el costo. Por lo general, los AFT son más caros debido al procedimiento de recolección de grasa.

"Durante el procedimiento de transferencia de grasa autóloga, también llamado injerto de grasa, el tejido graso se reubica de una a otra parte del cuerpo (generalmente los muslos, el abdomen y las nalgas) mediante liposucción. Este es un método ampliamente utilizado tanto en cirugía reconstructiva como estética debido a sus propiedades autólogas y su beneficio secundario de eliminar la grasa no deseada de otras áreas, aunque la ganancia de volumen es impredecible. La ganancia de volumen promedio oscila entre el 55 % y el 82 % en relación con el volumen de grasa injertada. La mayoría de las complicaciones reportadas son de baja morbilidad, el procedimiento tiene un buen perfil de seguridad a largo plazo. Aunque no hay evidencia de que el injerto de grasa aumente el riesgo de malignidad, se requiere un seguimiento a largo plazo".

Como promedio es justo decir que el 50% de la grasa injertada sobrevivirá, siendo esta la que permanecerá en el sitio trasplantado mientras que el 50% se desvanecerá lentamente y será absorbida. En el rostro, la grasa tiene mejores posibilidades de supervivencia pero necesitará varias AFT para lograr el resultado deseado.

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